Es fundamental vacunar con la BCG a niñas y niños recién nacidos. Es una dosis antes de egresar de la maternidad y previene las formas graves de tuberculosis, como por ejemplo la meningitis u osteomielitis.
La detección temprana es una de las principales herramientas para combatir esta enfermedad y tanto el diagnóstico como el tratamiento de la tuberculosis son gratuitos en todos los centros de salud y hospitales públicos de nuestra provincia.
¿Cómo se transmite?
De persona a persona a través del aire, cuando alguien con tuberculosis pulmonar sin tratamiento elimina gérmenes al estornudar, toser o hablar.
El contagio es más frecuente entre personas que conviven o pasan varias horas juntas, por ejemplo, familias, amigos, compañeros de trabajo, estudio, de instituciones deportivas y culturales.
El contacto con una persona enferma durante varias horas en ambientes cerrados y poco ventilados aumenta el riesgo de contagio.
¿Quiénes presentan mayor riesgo de enfermar?
Niños y niñas, adolescentes, personas gestantes, personas con VIH, personas con diabetes, personas malnutridas, personas con cáncer y personas en tratamiento inmunosupresor que baje las defensas.
¿Cómo prevenir el contagio?
Iluminar y ventilar los ambientes de la casa, escuela, trabajo, club, medios de transporte, etc. Mantener la higiene personal, lavado de manos, y del hogar. Al estornudar o toser cubrir la boca con el pliegue interno del brazo o un pañuelo desechable. Usar barbijo durante el período de contagio.
Los síntomas más habituales de la enfermedad son:
Tos persistente (con o sin expectoración) por más de 15 días.
Fiebre y sudoración, en especial durante la noche.
Eliminación de sangre en el catarro.
Falta de apetito y cansancio.
Pérdida de peso.
Es muy importante acudir al centro de salud u hospital más cercano al domicilio si presenta algunos de estos síntomas.