El Ministerio de Salud provincial recuerda las principales medidas para prevenir el Síndrome Urémico Hemolítico (SUH): lavarse las manos, higienizar comidas crudas y cocinar bien los alimentos, entre otras.
El SUH es una enfermedad que se manifiesta a través de un conjunto de síntomas y signos. Se considera síndrome urémico porque existe un compromiso en los riñones que puede llevar a una insuficiencia renal y hemolítico porque afecta a la sangre, se desintegran los glóbulos rojos y disminuyen las plaquetas en sangre.
En la República Argentina, SUH es una enfermedad endemoepidémica y presenta la mayor incidencia a nivel mundial de SUH en niños menores a 5 años de edad pero niños más grandes y adultos también pueden padecerla. Nuestra provincia no escapa a esta realidad.
El principal agente causal es una bacteria llamada Escherichia Coli productora de toxina Shiga (STEC).
Esta bacteria al llegar al intestino libera las toxinas Shiga, que pasan a la sangre y al llegar a distintos órganos produce lesiones.
En los últimos años, hubo una tendencia a adjudicar el SUH en forma casi exclusiva a la carne picada si bien esa es una fuente de transmisión, no es la única, leche y productos lácteos sin pasteurizar, Frutas y hortalizas mal lavadas, contacto directo/indirecto con materia fecal de animales de granja o domésticos, ingestión de agua contaminada de consumo o de piletas y natatorios, transmisión de persona a persona (vía fecal-oral) y por contaminación cruzada durante la preparación de alimentos son otras formas de transmisión.
Esta enfermedad generalmente inicia con diarrea, a veces con sangre, fiebre y/o vómitos, decaimiento y deshidratación, evoluciona hacia la colitis hemorrágica con una duración de 4 a 6 días. El paciente rápidamente se torna pálido y anémico. Puede presentar complicaciones evolucionando hacia el SUH presentando fallas en la función de los riñones. La enfermedad puede ser muy grave.
Es una patología estacional, presentando la mayor ocurrencia de casos en primavera y verano, aunque se pueden producir casos en cualquier época del año.
- Lavá cuidadosamente las manos con agua segura antes de comer, de preparar los alimentos, después de ir al baño, cambiar pañales o estar en contacto con animales . Es muy importante lavarse las manos y utensilios luego después de manipular carne cruda.
- los vegetales de hoja (lechuga, repollo, puerro, etc) con agua limpia y segura hoja por hoja debajo del chorro de agua
- las frutas aunque después las vayas a pelar, especialmente las que crecen en contacto con el suelo.
- verduras trozadas en bandejas, especialmente si se van a consumir crudas para ensalada.
- Separá: los alimentos crudos de los cocidos .
Utiliza tablas y utensilios distintos para cortar carnes crudas y alimentos listos para comer, o lavalos adecuadamente entre los distintos usos.
- Cociná: totalmente las carnes. Que no queden zonas rosadas en el interior y que los jugos sean claros. El color tiene que ser homogéneo en especial en las preparaciones con carne picada.
- Recordá que la cocción es la única medida que elimina al STEC si está presente en un alimento.
- Refrigerá: los alimentos hasta el momento del consumo. Respetar la cadena de frío. Un alimento descongelado no debe re- congelarse.
Muy poca cantidad de bacterias pueden enfermarnos por eso es importante evitar que se multipliquen.
- Comprá en lugares habilitados y con buenas condiciones de higiene, especialmente las carnes deben provenir de frigoríficos habilitados.La faena de animales sin las practicas adecuadas ponen en riesgo nuestra salud.
La compra por internet y redes sociales no siempre es segura.
Las comidas listas para el consumo (empanadas, tartas, pizzas) nunca deben ser exhibidas a temperatura ambiente.